viernes, 23 de septiembre de 2011

Película recomendada: La piel que habito (Pedro Almodovar, 2011)

Hoy vamos a repasar, en formato crítica, una de las películas más interesantes que ahora mismo están en la cartelera. La piel que habito, última película de Almodovar, que no ha estado exenta de polémica. Un film extraño, una rareza dentro de la filmografía del director manchego. Para algunos una obra maestra, para otros una autentica porquería, yo me declino más bien por lo primero. Sin mas dilación os dejo la critica.

Así es como me ha dejado La piel que habito, última película de Almodóvar y su film menos convencional; y eso que la filmografía de Almodóvar no se cataloga por ser convencional precisamente.
Aquí nos encontramos con un hibrido de thriller psicológico con drama obsesivo Almoriano; término que me acabo de inventar, pero que bien podría definir todas esas influencias personales que transmite el cine del director manchego.
Un guión enrevesado y confuso, con saltos en el tiempo y difícil relaciones entre personajes, a veces rozando lo absurdo, pero que se salva gracias a una dirección genial y a un impresionante trabajo de su elenco de actores. ¡Por fin una buena actuación de Antonio Banderas! Y sobre todo una impresionante Elena Anaya, nueva y atractiva chica Almodóvar.
A destacar también, como siempre, una más que conseguida banda sonora a cargo de siempre eficiente y genial Alberto Iglesias, que consigue mantenernos en tensión en todo momento y hace que no baje el ritmo argumental del film.
Y para terminar destacar el final, del cual no diré nada, pero que es un colofón perfecto para toda esa telaraña de sentimientos y complejidad que transmite esta gran película.
 
J

lunes, 19 de septiembre de 2011

Película recomendada: El cameraman (1928)

El cine de Keaton debería venderse en farmacias
 
Así de claro. Uno debería llegar a la farmacia y decir al farmacéutico: "Póngame una caja de Buster Keaton, 600 mg". No señores, no estoy loco ni bebido ni nada parecido. En esta asquerosa sociedad los problemas y las depresiones se curan a golpe de química. Millones de personas abusan de los antidepresivos para intentar superar algún mal trago o una situación triste. Por favor, déjense de tomar esas porquerias, yo les recomiendo algo mucho más sencillo y eficaz: una película de Buster Keaton. Con una buena dosis de cine de Keaton usted pasará un rato ameno y divertido, y si tiene algún tipo de depresión le aseguramos que ni siquiera se acordará de ella cuando finalice el film. AVISO: la ingesta masiva de películas de Keaton puede provocar efectos secundarios como dolor de diafragma o incontinencia urinaria.

Ahora en serio, la película es un no parar de situaciones divertidas. Escenas sublimes como la de las escaleras, la del vestuario, la de la piscina y sobre todo la extraordinaria secuencia en el barrio chino. El esquema del film es el típico de las películas de Keaton: un pobre hombre de gran corazón pero extremadamente torpe y con mala fortuna que se enamora de una chica a la cual deberá conquistar no sin antes rivalizar con el fanfarrón de turno. Entre tanto, golpes, caídas, porrazos, encontronazos con la ley... Si, es lo mismo de siempre, pero es que a Keaton le sale tan jodidamente bien que no necesita mucho más para hacer de un simple gag una obra de arte.

Hacen falta más Busters Keaton en este mundo, hombres sencillos, simples perdedores que gracias a sus payasadas pueden hacer felices a millones de personas tras casi 100 años. En el fondo Keaton era un auténtico privilegiado, porque amigos, pocos oficios me parecen más bonitos que el de hacer reir a la gente.

En fín, señoras y caballeros, déjense de prozac y otras guarrerías y prueben el "método Keaton", quedarán totalmente satisfechos (para más información consulte a su cinecéutico).

Y